Este mes la caja Degustabox estaba dedicada al desayuno y no me he podido resistir a hacer una receta dulce con uno de los productos que venía en la caja para que desayunéis bien. Y es que no hay nada mejor que el café para despertarse, ¿no os encanta el café recién hecho por la mañana? En concreto elegí el café Segaffredo, que tiene un aroma buenísimo y un sabor increíble.
Se trata de unos bizcochos de café que están deliciosos, yo los he hecho en versión individual (corté el bizcocho en porciones individuales con un cortapasta), pero podéis hacerlos como si fuera una tarta o incluso pequeñas “cupcakes”. Seguro que os encantan.
¡¡A ponerse el delantal!!
Ingredientes para el bizcocho.
– 75 gramos de mantequilla a temperatura ambiente.
– 150 gramos de azúcar integral de caña.
– 3 huevos.
– 3 cucharadas soperas de café hecho.
– 1 cucharada sopera de cacao en polvo desgrasado.
– 150 gramos de harina con levadura incorporada.
Ingredientes para la buttercream ligera
– 75 gramos de mantequilla a temperatura ambiente.
– 100 gramos de azúcar glas
– 3 cucharadas soperas de café hecho.
Lo primero que hay que hacer es hacer el café yo utilicé este de Segaffredo que es para cafetera de las de toda la vida, una vez que tengamos el café hecho, reservar.
Precalentar el horno a 180º y engrasar el molde que vayamos a utilizar, yo utilicé un molde redondo de bizcocho, de los desmontables y luego saqué las porciones con ayuda de un cortapastas redondo.
En un bol, poner la mantequilla a temperatura ambiente y el azúcar y batirlo junto para que se mezcle, en esta ocasión yo me ayudé de unas varillas eléctricas. Añadir los huevos uno a uno sin dejar de batir y hasta que no esté integrado el huevo no añadir el siguiente.
Añadir las 3 cucharadas soperas de café y mezclar bien. Ir añadiendo poco a poco la harina sin dejar de batir para que no se hagan grumos y quede la masa bien integrada.
Verter la mezcla en el molde que se ha engrasado y llevar al horno durante 30 minutos o hasta que el bizcocho esté hecho, lo podéis comprobar pinchando un palillo y si sale limpio, el bizcocho está listo.
Dejar enfriar.
Mientras el bizcocho se enfría, hacer la buttercream, yo la hice muy ligera pero podéis hacerla más consistente, eso es a vuestro gusto. Para ello, poner en un bol los ingredientes y batirlos con ayuda de unas varillas eléctricas hasta que tenga la consistencia deseada.
Una vez el bizcocho esté frío, adornarlo por encima con la buttercream y si queréis podéis poner unas nueces o fideos de chocolate.
Espero que os haya gustado.