Con este calor que estamos pasando no se puede encender el horno, pero hoy gracias a Degustabox y a Gelatina Royal os traigo una tarta que es muy fácil de hacer y que no necesita horno. Además, como podéis ver, es muy bonita y está riquísima. Es ideal para llevar a las comidas o cenas familiares que tenemos estos días, os aseguro que a la gente le va a encantar.
Tengo que decir que era la primera vez que hacía una tarta de este estilo y me ha encantado hacerla, no solo porque es muy fácil de hacer sino porque está muy rica y es muy fresca, y a mi esta en particular me ha parecido muy ligera.
¡¡A ponerse el delantal!!
Ingredientes para la base
– 150 gr de galletas (las mías sin gluten).
– 70 gr de mantequilla (la mía sin lactosa).
Ingredientes para la tarta.
– 4 yogures cremosos sin lactosa (los míos eran azucarados por lo que no agregué azúcar. Si los cogéis sin azúcar, agregad 100 gr de azúcar).
– 6 hojas de gelatina neutra.
– Unas gotas de zumo de limón.
– Un puñadito de moras.
Ingredientes para la cubierta.
– Un sobre de gelatina de arándanos.
Para hacer la base, triturar las galletas en un procesador de alimentos, derretir la mantequilla y mezclarlo bien hasta que quede una pasta. Cubrir la base de un molde desmontable redondo con papel sulfurizado y poner la pasta de tal manera que cubra toda la base. Guardar en la nevera para que se endurezca.
Poner a hidratar con agua las gelatinas. En un bol poner los yogures, removerlos y poner el puñadito de moras. Mezclar todo. Escurrir un poco de agua (unas gotas) en un cazo junto con unas gotas de zumo de limón, agregar las hojas de gelatina escurridas y remover hasta que se disuelva. Verter en el yogur y mezclar. Poner la mezcla en el molde desmontable, sobre la base de galletas y llevar a la nevera durante 4 o 6 horas. Yo la tuve toda la noche.
Para hacer la cubierta de gelatina, poner 250 ml de agua a hervir, cuando esté hirviendo agregar el contenido del sobre, remover hasta su total disolución y agregar otros 250 ml de agua esta vez fría. Dejar que enfríe hasta que tenga temperatura ambiente, y verter sobre la tarta. Llevar a la nevera durante 5 horas. Es importante que la mezcla de la gelatina no esté caliente porque si se pone caliente, podría estropear la parte del yogur.
Espero que os haya gustado.
