Seguimos buscando #elpanperfecto, y esta vez Marga nos propuso elaborar un pan sin amasado.
Yo me lancé directa al de Ibán Yarza, porque quería ir sobre seguro ya que era la primera vez que iba a hacer el levado en la nevera y la verdad es que iba con bastante miedo, aunque el resultado como veis es las fotos es estupendo.
Yo me decanté por hacer unas chapatitas individuales para poder tomarlas para desayunar y para que el pinche se las lleve al trabajo a modo bocadillo, además de las chapatitas hice una más grande, con lo cual con las cantidades que os voy a poner me salieron cuatro chapatitas y una barra grande. Podéis amoldar las cantidades si queréis.
¡¡A ponerse el delantal!!
Ingredientes
– 475 gramos de harina de fuerza.
– 25 gramos de harina integral de espelta.
– 330 ml de agua.
– 10 gramos de sal.
– 7 gramos de levadura de panadero (yo la compro de sobre en Mercadona).
En un bol pequeño, disolver la levadura en el agua templada.
En un bol más grande añadir todos los ingredientes y mezclarlos bien con una mano, con la otra mano se puede mover el bol y además la tendréis limpia. La masa tiene que quedar pegajosa, si no es así, añadir un poco más de agua.
Dejar reposar 5 minutos en el bol. Luego doblarla una vez, es decir, se coge la masa con la mano, se estira con cuidado y se dobla sobre sí misma.
Tapar el bol con film transparente o con una tapa hermética y llevar a la nevera. Yo la tuve durante toda la noche. Al día siguiente la masa habrá doblado el volumen, si no es así, hay que tenerla a temperatura ambiente durante una hora más o menos.
Preparar una mesa de trabajo enharinándola y volcar la masa y formar con delicadeza un rectángulo. Cortar dos pìezas del mismo tamaño y una de las piezas cortarla en cuatro trozos para hacer las chapatitas.
Poner las piezas en una bandeja de horno con papel de horno separadas entre sí. Taparlas con un paño y dejarlas reposar dos horas.
Precalentar el horno a 250º grados, meter el pan y crear un golpe de calor echando medio vaso de agua en una bandeja metálica ya caliente en el fondo del horno.
Transcurridos 10 minutos bajar la temperatura del horno a 220º, retirar la bandeja del horno y continuar la cocción durante 25 minutos más.
Espero que os haya gustado.
Te quedó súper! esa miga llena de agujeritos parece perfecta para poner un poco de mantequilla.
Espectacular¡¡¡menudo bocata me haria yo con un panecillo de esos recien horneado, besos
Pedazo de corteza te ha quedado. Casi puedo oír como cruje!! Genial!!
Un descubrimiento este pan, fácil y muy rico.
Bss
La miga es estupenda, y el formato chapata ha triunfado. Son geniales!